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Cada día hago menos y soy más

Voto de conciencia

No soy apolítica aunque tampoco partidista.

No soy objetiva aunque resulte imparcial.

Escucho callada cuando me dejan hablar

y escribo lo que quiero cuando oyen sin atender.

Asiento ante la diligencia del reconocimiento del error

y me refreno prudente ante un acierto con desazón.

Me desborda la cautela ante un vaticinio atroz:

Eterna reserva con lo más certero y

silencio absoluto ante la palabra dolor.

Hipocresía y honestidad, iguales bajo el mal uso.

Empatía versus inercia, también al gobernar.

   

Posturas infinitas ante las casualidades del destino y

una única, ante las fatalidades forjadas que se podían evitar:

          reclinada,

          con tristeza

                    y vacío.

Mucha suerte señor Mandamás.

A usted le tocará aprender de viejo

porque la oportunidad de alumno aventajado

no la supo aprovechar.

Y yo,

que atiendo callada cuando me dejan hablar

y escribo alto cuando me oyen sin escuchar,

Le exhorto que aprenda a disculparse

a todos por los que habló

Y recoja votos

            de conciencia,

retirado de la vida pública

y fuera de la privada

            de los que representó.

12 comentarios

yolijolie -

Akiv,
hay de todo y más en la botica de la abuela, pero cuando a uno le tocan la moral, ni botica ni farmacia de guardia. Todos son unos matasanos sin remedio que provocan cefaleas y disgutos. Pero llámame ingenua, pero quiero pensar, porque lo necesito, que aún queda mucha cosa buena habida y por haber.
bonita metáfora utizada. Ojajá según que momentos de urgencia máxima, pudieran comprarse las virtudes a granel.
Un abrazo

yolijolie -

Suleiman,
tu larga perorata como tú la defines me deja sin palabra alguna. Comparto totalmente tu idea expuesta, más que la inicial, llevada por el "odio" momentanio al ver las declaraciones de este político.
Formamos un partidito entre todos y nos revelamos sin tanto rollo de película?
Un abrazo

yolijolie -

Bona tarda Xavi,
me encanta que te haya encantado, pero se lo debo a Aznar, que me inspira (mucho mejor que hacerme resoplar) y estoy deacuerdo en que la rabia es cegadora, tanto a nivel político como personal, y en esta situación, lo mejor es seguir aprendiendo, aunque parezca imposible, y tirar para delante con ganas de que las cosas mejoren.
Pd: todo lo que decía tu madre estaba regado de sabiduría y bañado en cariño incondicional.
Un beso enorme para los dos.

yolijolie -

Capitán, usted mejor que nadie sabe que el Titanic necesitaba su figura, aunque se acabase hundiendo igual. Creo en un gobernante cercano más a las gentes que a las leyes, que delegue lo teórico y se centre en lo práctico, con las orejas bien abiertas y limpias de polvorín.
Saludos.
pd: Que mañana tenga un día estupendo.

Xavi -

Queridos contertulianos. Verdaderamente es sorprendente ver qué fácil es discernir sobre política (este és el octavo comentario) y a la vez lo "disgustados" que estamos con los políticos. Supongo que es por que nos afecta más de lo que queremos, y en el fondo nos da rabia tantas injusticias. Yo apuesto por el egoísmo y la exhaltacion de la individualidad, pero también por el respeto y ayudas mútuas. Estoy totalmente de acuerdo con su último comentario, sr. Suleiman, ya que como decía mi madre: "En el pot petit hi ha la bona confitura". Siempre lo más cercano a nosotros y lo más minoritario, será lo más natural y fidedigno, pero...lamentablemente, será minoritario!
Vivamos y disfrutemos mientras ellos se pelean!
Por cierto, querida Yolanda, felicidades por tu relato, me ha encantado. Una vez más, me ha sorpendido gratamente.
Besos.

Suleiman -

Pero la política forma parte de nuestra vida, Capitán, nos guste o no, tenemos que convivir en sociedad, y cumplir unas normas que tienen como objeto evitar el caos. Por desgracia el egoismo de la especie humana evita que podamos autogestionarnos, y claro, alguien tiene que dictar esas normas y velar por que se cumplan. Soy escéptico en lo que respecta a la integridad de muchos políticos, pero no descarto la buena fe de otros muchos que desde posiciones muy discretas trabajan por el bien común, y en muchas ocasiones de manera totalmente altruista e incomprendida. El odio genera odio, y la consciencia no nos es dictada, aceptamos o no lo que tengan que decirnos, y somos nosotros mismos los que debemos discernir si lo que nos plantean atenta contra lo que consideramos justo o no. Quizás es nuestro desinterés por los asuntos políticos (en un amplio sentido) lo que ha generado una nueva clase de élite dirigente que ha llegado a creerse que está por encima del bien y del mal. De nosotros depende, pues, evitar que siga siendo así.
Y perdonad mi larga perorata..

Capitán Pescanova -

Me gusta definirme como antipolítico, no como apolítico.
Odio, en general, a toda esa pandilla de dictadores de consciencias ajenas.
No creo en ninguno, aunque sepa que son inevitables.
Sólo se puede aspirar al menos malo.
Un saludo.

Akiv -

¿Conciencia...? mmm... No sé, espere que lo busco "Conocimiento interior del bien y del mal.Conocimiento reflexivo de las cosas." Ah..¡ eso..¡ No, pues no me queda nada. Tampoco me pregunte por honestidad, lealtad, humanidad o respeto que ya no tengo... Y no se moleste en buscar de esto entre la clase política porque apenas queda. Busque usted por ahí fuera, a ver si encuentra algo... pero dese prisa, que cada vez escasea más.

yolijolie -

Efectivamente querido, dije bendecido, como algo milagroso....

Suleiman -

Estimado y perplejo extraterrestre:
¿Dijo usted un "ser bendecido con la racionalidad"? No me quedó claro a quien se refería... ;-)

yolijolie -

(..............................)

Soy un extraterrestre del planeta Saturno y sin papeles y me planto frente al televisor donde aparece este señor que trabaja representándome en decisiones que me incumben y lo oigo disculparse por una verdad que resultó ser mentira, o una mentira que disfrazó de verdad. Las consecuencias, me cuentan, fueron atroces y se me encoge el alma con sólo oírlas relatar, provocadas por una decisión no apoyada por la inmensa mayoría de sus representados. Tratándose de una guerra, las consecuencias fueron inocentes muertos, y no Tratados; fueron víctimas de por vida, y no Proyectos de Ley.
Pero aún y así, aún y la envergadura de la decisión, yo, que no soy de aquí, que ni tan siquiera entiendo vuestro idioma, me parece asquerosa e insultante, denigrante y repulsiva, la manera que tiene un ser, bendecido con la racionalidad, de mostrar su pesar ante a la aflicción causada con su mentira.

Suleiman -

Desearía ser imparcial, pero hay veces que no puedo, y en algunos momentos me siento en la necesidad de tomar partido por algo. Cuando se pretendió engañarnos, cuando se quiso manipular a una buena parte de la sociedad con mentiras, y cuando estas mentiras han provocado miles de muertos, mi imparcialidad se desvanece, y mi indignación fluye como un ardiente geiser en mis venas. Nada puede justificar la muerte de un inocente, y los espureos motivos que imaginamos (aunque no podemos probar) se esconden tras la guerra en la que este "personajillo de opereta" nos metió, aún desatan más mi fúria hacia él y el coro de marionetas que lo aplauden. Afortunadamente esta furia, y la de millones de ciudadanos como yo, es pacífica y únicamente la manifestamos con la palabra... Tienen suerte.